Estoy de acuerdo. Los pequeños sitios encierran más alma, más sentimiento, más contacto entre comprador, vendedor y objetos. Y su historia, en algunos casos, es poema.
Deberíamos defender un poco más los sitios pequeños, los de barrio, los de trato tan directo.
Pequeños sitios, pequeños rincones. Me sigue gustando más esto que la globalidad. Saludos
Estoy de acuerdo. Los pequeños sitios encierran más alma, más sentimiento, más contacto entre comprador, vendedor y objetos. Y su historia, en algunos casos, es poema.
Deberíamos defender un poco más los sitios pequeños, los de barrio, los de trato tan directo.
Gracias y un abrazo.
Muy interesante la imagen. Y maravillosas tiendecitas… ¿de qué lugar?
Muchas gracias.
Un abrazo.
Hola Isabel.
Corresponde a Turín, en Italia. A unos soportales en sus majestuosas calles.
Gracias por comentar.
Un abrazo.