Tú…
Me lleno de ti cuando te veo, te siento, te quiero…
Tú, tú me traes,
y me llevas al azul del firmamento…
Tu, y solo tú…,
a tus brazos yo me entrego, con deseo…
…Cuando me marcho, tú,
tú vienes conmigo, con mi recuerdo…
No te preocupe si algún día
no puedes estar o contestar,
que igual te quiero,
que igual te sueño,
que igual te anhelo,
que yo seguiré aquí,
esperando tu regreso.
A la vera de este río de Amor que a ti te lleva…,
y te trae hasta mis brazos en espera…
A la espera de tu cuerpo, de tu risa, de tus besos…,
que aquí esperaré
hasta que la lluvia de tu ausencia cese
y deje de calar mi vida entera…
…No temas, yo seguiré aquí,
siempre a la espera…
Qué dulce poema, Juan…
Me has hecho recordar aquella canción de Pablo Alborán: “Solamente tú” 🙂
Muchas gracias Loretta.
Pues es una canción preciosa. Me alegra que la puedas comparar.
Abrazos.
Gracias a ti, Juan.
🙂 😉
… Niño, te colaste en mi pensamiento, jejeje.
Vaya, no has podido expresar mejor lo que yo siento! 😉
Un abrazo,
Carol.
Pues me alegra saberlo, Carol. Hay un poco de empatía en todo esto.
Hay veces que sale del tirón lo que queremos expresar, y otros no sabemos ni como comenzar… Cuestión de esperar el tiempo preciso.
Un abrazo
Y si me permites, sólo si me permites…¿Puedo repostear tu poema?
¡Por supuesto que sí…! Faltaría más…
Cuando quieras, yo encantado de saques de paseo mis cosas a otros prados donde correteen, jejeje
Muchas gracias por ello.
Un abrazo
Bello poema.
Me encantó.
Besos y abrazos. 🙂
Muchas gracias Rotze.
Me alegra que te encantara. Un honor para mí.
Más besos y abrazos de vuelta. 😉
No me canso de decirlo, una delicia!
Besos, Juan Ignacio…
Gracias María.
Encantado que lo sientas así, que te guste de esa manera.
Besos y abrazos
Qué hermosa forma de decirlo, con esa tenacidad casi como de niños, sin malicia, con auténtico amor, aquí estaré, amar sin ataduras, amar de verdad, proyectando la libertad que uno siente al saberse amado. Y eso no es fácil de sentir. Un abrazo, amigo!
Gracias Carmen. El Amor sebe ser así, sin ataduras, lo más verdadero posible y muy sentido, muy de corazón, de otra forma no funcionará bien.
Intentaremos sentirnos así de libres amando.
Te agradezco tu comentario
Un abrazo
Ay, y me van a decir copiona, pero me encantaría también repostear este poema tuyo en mi blog El Duende… si, o si? 😉
Encantado de que lo hagas. Lo puedes repostear donde quieras, ya me dirás y lo veo después.
Muchas gracias por ello, por darme eco en otros rincones tan bellos como tu blog.
Un abrazo
Juan, lo acabo de repostear en http://ulutin.wordpress.com/ ¡Gracias y fuerte abrazo!
¡Mil gracias, Carmen…!
Eso es una nueva ventana para mi casa de mágicos momentos, entrará más luz y se verán mejor las cosas que hay dentro…
¡Un placer!
Abrazos
Reblogueó esto en csolisp.
Muchas gracias, Carol.
Estar en tu blog supone nuevos horizontes para mi espacio, y nuevas miradas, y nuevos amigos…
Un abrazo
Precioso texto, Juan. Gracias por compartir.
Un abrazo.
Gracias a ti por apreciarlo y comentarlo
Un abrazo, Javi
Pingback: Siempre a la espera … | El Duende de las Palabras
Muchas gracias…
Qué poema tan bonito, sencillo y lleno de amor, delicado y fuerte a la vez. Bonito, si, muy,muy bonito. Bss
Gracias Paloma. Hay que estar siempre a la espera, merece la pena.
Besos
Qué hermoso y cuánto amor al escribirlo y sentirlo…gracias por este regalo. Un abrazo fuerte Juan Ignacio,
Gracias Cristina por sentirlo tan sentido… Eso es exactamente lo que intentaba transmitir con él. Un placer compartirlo.
Abrazos.