Vivíamos separados.
Tú en tu mundo,
yo en el mío,
Con esa valla de espino retorcido
que fue marcando
la distancia
que separaba
nuestro andar en el camino.
No dimos salto tan alto.
No había hueco,
o no vimos
por donde poder conectar
mi alma viajera
a tu corazón callado.
El que yo quise
fuera siempre mi destino.
Palos y alambre…
Silencio y espinos…
No conectaba la puerta
de tu mirada al otro lado,
tu paseo a mi sendero.
Tu voz nunca dijo ven.
Tu Amor siempre
fue tan frío…
la valla de espino
se clava en mi recuerdo.
No supe como saltar
sin tropezarme de nuevo.
No supe como tumbar
ese dolor por no vernos.
La valla de espino
sigue marcando
los dos caminos…
Unas reales y otras creadas por nosotros mismos. Son tantas e insalvables las vallas de espino…….
¡Bonitas y tristes estrofas!
Un abrazo
Tendremos que rodear la valla. O tomar impulso para saltarla. O mirar al otro lado y esperar a que sea derribada.
Gracias por comentar, Make.
Abrazos
Este poema besa el alma y merece darle un pase por alguna parte.
Y él estará encantado de acompañarte, seguro.
Muchas gracias, Melani, por compartirlo con tu gente.
Abrazos
Hala vamos a pasear por el paraiso de canela y miel..
Dispuesto para ello!!
¡Adelante…!
Jjajajajaja tu siempre estás dispuesto para todo , pues hala vamos , hala vamos a pasear agarradito de la mano 🙂 🙂
Siempre dispuesto, por si acaso… 😉
Reblogueó esto en CANELA&MIEL{**HAZME SENTIR LO KE PIENSAS**}y comentado:
Como siempre mi amigo Juan Ignacio tan romantico .
Agradecido, Melani.
¡Qué poema! Me ha encantado.
Un abrazo y feliz martes.
Me alegra saberlo, Javi. Un honor para mí que así sea.
Un abrazo y un buen jueves
¡¡¡Qué poema tan romántico Juan Ignacio!!!Pero a la vez un poco triste!!!…
Como realmente sucede con el Amor!!!
Realmente me ha encantado, Lo que a veces sucede de verdad…
…Son las vallas que separan dos vidas, eso es autentico!!!
Un abrazo amigo y Buena Semana!!!
El Amor, como la vida, también tienen sus lados abruptos, sus lados difíciles, sus lados separados por alambre de espino. Pero al final siempre sale de nuevo el sol y comienza un nuevo día.
Me alegro de que te haya gustado, Rosita.
Abrazos
¡Qué bonito!. Sentimiento en poesía. Al leerlo se clava en el alma un trocito de la valla de espino.
Cuidado con las heridas del espino!!