Otra tarde

La sala vacía bajo la penumbra
de un sol mortecino hacia media tarde.
La vista buscando, la radio encendida
y, como una sombra, bailando despacio,
está tu figura que solo el recuerdo
es el que me muestra, es el que imagina.

Y yo con mis manos buscando tu rostro
que de ojos cerrados espera y suspira.
En cada paseo que daban mis dedos,
cuando aquellas tardes tu piel recorría
desde el horizonte de tu blusa blanca
hasta cobijarlos detrás de tu pelo.

Y mi melodía te atrapa de nuevo,
y en tu ritmo yo solo quiero vivir.
La música suena queriendo envolvernos,
llenando de besos todos los rincones,
como si de flores, que van floreciendo,
llenaran las tapias de un frío jardín.

Compás tras compás tú me fuiste queriendo.
Adagio mis brazos, rodean tu ser.
Pedazos de Amor me regalan tus besos
cuando se deshacen, chocando en silencio,
dentro de mi boca, que espera impaciente,
a que, como lluvia, me empapen después.

El sol se ha marchado, con él tu recuerdo.
Ya sabes que a oscuras da miedo vivir.
Con esos fantasmas que sacan provecho
cuando por la noche no queda consuelo,
y un río parece más grande que el cielo,
y un mar aún más triste que un día sin ti.

La sala vacía, ya se ha hecho de noche.
La música, muda, dejó de sonar.
El frío me roza mojando mi sueño,
y cierro la puerta dejando allí dentro
a mi corazón junto a tanto recuerdo
hasta que en otra tarde me vuelva a atrapar…

© 2018  J.I. Salmerón

10 pensamientos en “Otra tarde

Deja una respuesta

Introduce tus datos o haz clic en un icono para iniciar sesión:

Logo de WordPress.com

Estás comentando usando tu cuenta de WordPress.com. Salir /  Cambiar )

Foto de Facebook

Estás comentando usando tu cuenta de Facebook. Salir /  Cambiar )

Conectando a %s

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.