Te arrastraba la distancia
como lentamente
va arrastrando el río
todo el agua hacia su mar.
Hasta que no se distingue
el andar de tu figura.
Hasta que te haces pequeña
como flor en la ciudad.
Te fui perdiendo a lo lejos
como pierde la esperanza
la luna pálida y blanca
ante cada amanecer.
Te fui soñando, recuerdo,
como cada noche sueño
que me envuelvo con tu cuerpo,
que me abrazo a tu querer.
Y no te veo volver…
No se acorta la distancia
con tus besos.
No tiene razón de ser,
que esta distancia siga
batiendo record.
Cada mañana miro a lo lejos
buscando allí tu recuerdo.
Y salgo andando a buscarte
y cuando llego, ya no te encuentro…