Siempre me gustó hacer tríos.
La luna, tu cuerpo, y mi Amor.
El sol, tus caricias, mis besos.
Siempre fuimos más de dos.
La tarde cuando estaba anocheciendo.
Las ganas de abrazarte en el salón.
La forma de expresar tu movimiento.
Siempre sumando uno al tú y yo…
Así fue el Amor vivido.
Al menos, que yo sepa, nuestro Amor.
Nunca solos en los sitios,
siempre había un gesto entre los dos.
Y aunque lo pareciera, nunca estuve,
no fui celoso de esa situación.
No me importó repartir mis caricias
entre tu espalda y mi imaginación.
Siempre se suma queriendo.
no importa si miran dos.
Al fin y al cabo, en lo oscuro,
tu cuerpo no ve el ruiseñor.
Siempre tuvimos algo a nuestro lado.
Ni siquiera en los bailes de salón
tu pecho con mi pecho se juntaron,
en medio siempre la respiración.
No había forma alguna
de estar los dos a solas,
la arena lo impedía,
como al mar con sus olas.
Ni siquiera en el asiento del coche
cuando nos regalábamos te quieros,
estábamos ajenos a la noche
sumando siempre tres, y algún lucero.
Siempre fuimos sumando,
tu y yo, y algún deseo.
Siempre estaba estorbando
la ropa entre los cuerpos.
Pero al ser multitud, y lo comprendo,
quisiste hacer un dúo en otro lado
y así tu corazón perdió el acento
dejando a nuestro Amor en el pasado.
¡La luna con mi Amor!
¡El sol junto a mis besos!
Ya solo fuimos dos
buscando tu regreso…
Hoy somos solo dos, yo y mi recuerdo.
Tu cuerpo se marchó junto a tu voz
No hay trío que formar junto a mis besos
Tu boca, y tu mirar, ya se cerró.
Siempre me gustó hacer tríos,
Pero hoy los llena el dolor
con tu distancia y olvido,
con ese Amor hoy perdido,
que siempre dio más de dos…