…Perdona mi atrevimiento
por querer acariciarte.
Perdona, pero soy viento,
y calmo mi sentimiento
abrazando a cada instante.
Así consigo tenerte.
Besarte suave en el cuello.
Tus manos poder tocarte
y entre susurros contarte
que soplo por ser tu dueño.
¡Y soplo y soplo, tan fuerte,
con ganas ya de tenerte,
que vuela a ti mi deseo…!
…Perdona por el descaro
que tengo cuando te veo.
Perdona, pero soy tiempo,
me pierdo si no te rozo
y entre segundos me muero.
Así consigo atraparte
entre el ayer y el anhelo.
Entre el mañana y el beso
que tiene a mi cuerpo preso
entre minutos de celos.
¡Y paro cualquier aguja,
en el reloj del momento,
para entregarte lo eterno…!
…Perdona la indisciplina
de mis ojos al mirarte.
Perdona, pero soy cielo,
que aleja todos sus miedos
al ver tu estrella brillante.
Así consigo alumbrarme,
siendo de día en mis sueños.
Así no hay nubes oscuras,
vagando por mis alturas,
si miro a tus ojos bellos.
¡Y pinto de azul el día,
y luna pongo a la noche,
llenando todo de besos…!
…Perdona mi atrevimiento
si he querido enamorarte.
El cielo, el viento, y el tiempo,
no tienen otro argumento
para poder conquistarte…