Cuando yo no esté…

Juan I. Salmerón

 

…Cuando yo no esté
las amapolas nacerán igual
en su rojo mar de cristal,
rojo de atardeceres…

Cuando yo me vaya
mi sombra siempre estará
cobijando este lugar
de soles abrasadores…

…Y todo quedará igual,
la arboleda, el manantial,
las barcas sobre la mar,
los fríos amaneceres…

Cuando me haya ido
y el tiempo vaya conmigo,
a ver las horas pasar, seguro,
se pararán mis amigos…

Soy yo el que no podrá estar
viendo a esta vida pasar
pues ella es la que ha supuesto
que aquí no tengo lugar.

¡Que ya ha pasado mi paso…!
¡Que ya el camino es completo…!
¡Que tengo cosas que hacer
donde  se vuelven los vientos…!

…Y todo quedará igual,
la arboleda, el manantial,
las barcas sobre la mar,
los lentos atardeceres…

Que otros amaneceres
esperan mis ojos verlos
en los confines del cielo,
en lo infinito del tiempo…

No quiero yo más penar,
ni a los que tanto yo quiero,
que otro mágico lugar
me espera detrás del cielo…

No os quiero yo ver llorar
si en horizontes me pierdo,
que con el viento estaré
acariciando cual beso…

…Y todo quedará igual,
la arboleda, el manantial,
las barcas sobre la mar,
y mi recuerdo entre flores…

…Cuando yo no esté
las rosas sobre el rosal,
en su rojo ventanal,
me anunciarán entre amores…

© 2015  J.I. Salmerón

26 pensamientos en “Cuando yo no esté…

  1. EL VIAJE DEFINITIVO

    Y yo me iré. Y se quedarán los pájaros
    cantando.

    Y se quedará mi huerto con su verde árbol,
    y con su pozo blanco.

    Todas las tardes el cielo será azul y plácido,
    y tocarán, como esta tarde están tocando,
    las campanas del campanario.

    Se morirán aquellos que me amaron
    y el pueblo se hará nuevo cada año;
    y lejos del bullicio distinto, sordo, raro
    del domingo cerrado, del coche de las cinco,
    de las siestas del baño,en el rincón secreto
    de mi huerto florido y encalado,
    mi espíritu de hoy errará, nostálgico…

    Y yo me iré, y seré otro, sin hogar, sin árbol
    verde, sin pozo blanco,
    sin cielo azul y plácido…

    Y se quedarán los pájaros cantando.

    Juan Ramon Jimenez

    Gracias por este poema que has compartido.

    Me gustó mucho pero me puso demasiado triste.

    Es lo que menos necesita mi alma en este momento. Vivi la muerte over and over y por eso no la amo. Me robó momentos de dicha y felicidad en los momentos medulares de mi vida.

    Equilibrio de vida y muerte, de luz y sombra, de felicidad y dolor.

    Equilibrio es sano. Cuando la balanza se inclina desproporcionalmente hacia un lado, es nocivo. No es saludable en ningun aspecto.

    Por eso, por esa razon y no otra, en este momento importante de mi vida, procuro equilibrar mi cuerpo fisico, mental , emocional y espiritual con fuentes de energia que me provean felicidad, paz y vida, con amor nacido del espiritu de los que me aman, empezando por mi misma, procuro hacerme feliz como pueda.

    Es hasta equilibrarme energeticamente y transmutar mis celulas, todos mis cuerpos, sutiles y fisicos.

    Exceso de luz, encandila, exceso de oscuridad espanta.

    EQUILIBRIO es la clave de la armonia. en todos los sentidos.

    Muchas Gracias igual, por escribir y compartir un poema tan hermoso en forma y contenido.

    Instantaneamente, me hizo recordar otro que comparti, porque ese poema me acompaño en mi vida llena y colmada de muerte una y otra vez.

    Pat

    • La muerte es a la vida como la noche al día, sabemos que llegará y nos enfrentaremos, tan solo es cuestión de tiempo.

      Gracias Pat, por el comentario. La vida sigue, sin embargo.
      Un abrazo

      • No leiste bien mi comentario o tal vez si lo has leido con suma atencion de tu parte, pero no lo entendiste ni en esencia, ni en detalle, ni en verdadera profundidad, poeta.

        No tienes porque entenderlo. Descuida. Soy una desconocida para ti, no sabes nada de mi, solo puedes percibir o intuir fragmentos de mi ser que dejo entrever, a veces, en mis letras.

        No has visto mis pupilas. No has usado mis zapatos.

        Muchas Gracias por tu hermoso poema, por tu cálido comentario hacia mi,

        Gracias por enunciar tu verdad, no tienes que entender la mia, mi propia verdad basada en mi propia experiencia de vida y de muerte.

        Gracias por todo.

        Cuida tus bioritmos, es parte de la vida hacerlo con responsabilidad y conciencia para vivir plena, intensa y apasionadamente hasta que dejes de hacerlo.

        Cuidarnos es parte de la entrega de amor hacia uno mismo, hacia el otro que amamos, es parte de la huella imborrable que dejamos al trascender este plano de existencia, tempo-espacial.

        Un abrazo puro y fraterno, sincero y cálido en esencia, te envio desde Argentina.

        Pat

  2. Todos somos prescindibles, claro que si.
    Pero cuando alguien se marcha, todo parece que sigue igual, aunque no es así.
    En nuestro paso por la vida, dejamos huella, para bien o para mal y unos más que otros, es verdad. Nada vuelve a ser igual, nada, créeme.
    Hay que hacer como que todo sigue igual para poder continuar, para poder vivir con cierto equilibrio, pero no es fácil.

    Preciosos versos has enlazado esta noche, el alma se ha estremecido de qué manera………….gracias por compartir.
    BESO

    • Todo cambia para nosotros cuando alguien se marcha, por un momento o para siempre, por eso solo hablo de las cosas que nos rodean, que esas siguen impasibles al paso del tiempo, al paso de nuestros cuerpos. Hay veces que es mejor dejarse llevar y sentir con todas sus consecuencias, sin fingir. Pero eso tiene un alto precio y en nuestro cuerpo deja mucha huella. Por eso pido que los demás no lo vean como un adiós, tan solo como un cambio de existencia.
      La huella que dejamos es el camino para los que vienen detrás buscándonos, así que, ¡dejemos huella siempre…! Puede que se termine necesitando…

      Me alegro que te haya gustado y el alma se emocione al leerlo.
      Un placer compartirlo.
      Fuerte abrazo, Make.

  3. Oleo de una mujer con sombrero

    -Trova cubana-

    Silvio Rodriguez y Pablo Milanes.

    Una mujer se ha perdido
    conocer el delirio y el polvo,
    se ha perdido esta bella locura,
    su breve cintura debajo de mí.

    Se ha perdido mi forma de amar,
    se ha perdido mi huella en su mar.

    Veo una luz que vacila
    y promete dejarnos a oscuras.

    Veo un perro ladrando a la luna
    con otra figura que recuerda a mí.

    Veo más: veo que no me halló.
    Veo más: veo que se perdió.

    La cobardía es asunto
    de los hombres, no de los amantes.

    Los amores cobardes no llegan a amores,
    ni a historias, se quedan allí.

    Ni el recuerdo los puede salvar,
    ni el mejor orador conjugar.

    Una mujer innombrable
    huye como una gaviota
    y yo rápido seco mis botas,
    blasfemo una nota y apago el reloj.

    Qué me tenga cuidado el amor,
    que le puedo cantar su canción.

    Una mujer con sombrero,
    como un cuadro del viejo Chagall,
    corrompiéndose al centro del miedo
    y yo, que no soy bueno, me puse a llorar.

    Pero entonces lloraba por mí,
    y ahora lloro por verla morir.

    http://mundonuevoenlatierra.blogspot.com.ar/2015/04/arte-audiovisual-oleo-de-una-mujer-con.html

    • Muchas Gracias por mencionar lo de la imagen, ni la habia visto, porque solo me centré en el titulo que vi en mi bandeja de entrada de mi correo, que me hizo llorar sin haber leido el poema aun, por dentro llore, los ojos se me pusieron vidriosos, de verdad.

      Bellisima foto, es verdad, muy hermosa en mas de un sentido.

      Hoy te escribi varios correos mentalmente, no los escribi por eso no te los envié.

      Gracias por no haber publicado mis comentarios en tu blog, haberlos mantenido en privado. Gracias por tus calidas palabras para conmigo, fueron las que me invitaron a escribirte esos correos mentalmente.

      Recibe un abrazo fuerte, muy fuerte, puro, agradecido, cálido y sincero de mi parte.

      Pat

  4. Ay , Juan Ignacio, que versos tan sentidos, es como la vida misma, tan bien plasmados, me han llegado al alma.

    Cuando nos hayamos ido,
    las rosas anunciarán nuestra brisa,
    nuestra sonrisa temprana,
    nuestro misterio,
    nuestras ganas de decir….
    sin decir nada.

    Te envio un fuerte fuerte FUERTE Abrazo y deseo que esto ocurra dentro de muuuuuuuuuchos pero que mmmmmmmmmuchos años. Aunque quizas sea tan hermoso que somos demasiado ilusos queriendo verlo todo ….. solamente AQUI.

    Besos, Juan Ignacio!!

    • Me has hecho sonreir de nuevo con este comentario….Gracias por hacerme sonreir…Recibe otro abrazo muy fuerte y sincero de mi parte.

      Pat

    • Hola, Carmen.
      Yo también espero que sea dentro de muchos años, pero como es algo inevitable, algo seguro, de vez en cuando hay que pensar en ello para intentar normalizarlo.
      Agradezco tus deseos de longevidad hacia mí, que son recíprocos, para seguir disfrutando en esta vida todo el tiempo que podamos.
      Me alegra saber que tu alma fue tocada por mis versos y fue, por ti, tan sentida.

      Un fuerte abrazo, Carmen.

  5. Qué bello poema Juan, es de los que reconfortan.
    «…Cuando yo no esté
    las rosas sobre el rosal,
    en su rojo ventanal
    me anunciarán entre amores.»
    No podríamos vivir sin esa idea de permanencia, de pensar que algo de nosotros queda en el aire, en cada una de las cosas y personas que hemos amado, gracias por poner tan bellas palabras a ese pensamiento. Bss

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